Un día inolvidable

Estoy cansado.

¿porqué?

Me tratan muy mal en el trabajo. Todos los días llega un momento que me voy al baño a llorar porque no puedo mas.... Estan constantemente riéndose de mi y, por ejemplo, cuando se van a comer, nunca me dicen nada o cuando ocurre cualquier cosa especial en la oficina, no se es el cumpleaños de alguien o algo así, es como si yo no estuviera... Me encuentro muy mal.

¿Y que vas a hacer?

No se. Cada día tengo terror de llegar a la oficina y, la verdad, es que no se porqué... yo no he hecho nada para que me traten así.

A lo mejor es justamente porque no has hecho nada.

¿Que quieres decir?

¿A ti te interesa la gente de tu trabajo?

De verdad es que son lerdos como ellos solos. Todo el puto día perdiendo el tiempo y criticando a fulanito, y a menganito y hablando de idioteces. Estoy harto.

Y, ¿no es un poco raro que todos los empleados de la oficina sean lerdos? Vamos, la oficina funciona ¿no?

No te entiendo. Parece que estas diciendo que es culpa mía.

Lo siento, Sergio, pero yo creo que eres un poco raro. Te cuesta mucho apreciar lo que hacen los demás, y siempre en las conversaciones estas como abstraido. No te centras en lo que se esta diciendo.

La mitad de las veces no se de lo que se esta hablando y, según pasa el tiempo y no tengo nada que decir, al final me quedo un poco como aislado. Y la verdad es que tampoco es que sea un sentimiento muy agradable, claro. No se, a mi contigo no me pasa. Ni con Antonio, ni Enrique, no se, con nuestros amigos charlamos tan tranquilos y no estoy constantemente pensando en que me siento fuera de lugar, o que no me interesa lo que se dice. En realidad es que no me siento nada cómodo cuando estoy con esa gente hablando.

¿Y no hay nadie que te deje un poco mas tranquilo?

Bueno, hay un chaval nuevo, Medina, que tiene buena pinta. Es muy tranquilo y, las pocas veces que me he dirigido a el, una palabra o dos como mucho, siempre me ha contestado con una sonrisa y, no se, siempre con un gesto muy tranquilo.

Pues mira, por algo se empieza. Yo, la verdad, es que no tengo ese problema y, aunque creo que puedo entender un poquito tu situación, se que es muy difícil. Pero, sobre todo, creo que nuestra vida debe ser buena porque nosotros mismos nos esforzamos en que sea buena. Y eso de echar la culpa constantemente a los demás me parece síntoma de egoísmo por un lado, y ceguera por otro.

¿Egoismo?

Si, egoismo, porque cuando uno esta constantemente pensando en si mismo, es porque se cree que sus problemas son los mas importantes del mundo y, mira, por muy grave que sea tu situación, y ya te digo que me lo parece... de hecho me imagino que con gran probabilidad yo estaría como tu si me pasase algo parecido..., pero bueno, como decía, por muy grave que sea, todo el mundo pasa por cosas muy serias, que también merecen la pena prestarles atención y no quedarse ahí como atontado cuando te las cuentan.

Ahora que lo dices, supongo que tienes razón. Pero es que es como un perro que se muerde la cola porque, ahora, cada vez que conozco a una persona estoy aterrado desde el principio. Claro, por miedo a que me haga daño, ya estoy constantemente pesando en mi mismo, no presto atención a lo que el dice, y supongo que la gente se harta...

Si, es normal. Lo que pasa es que, aunque sea extremadamente difícil porque, al fin y al cabo todos tenemos dos piernas y dos manos, y parecemos iguales, cada vez que se conoce a una persona nueva tendríamos que empezar por darle todo con absoluta confianza. No se, como si tuviésemos memoria de pez que no nos deja acordarnos de lo horrible que ha sido nuestra experiencia anterior con el ser humano, y lo viésemos como una fuente de alegría. Al fin y al cabo nuestra relación con ese nuevo ser humano va a depender de como nos comportemos con él, y no como se hayan comportado los demás con nosotros mismos. Es verdad que hay gente que hace mucho daño. Creo que, por el mismo motivo por el que tu te escondes, hay otra gente que utiliza su desconfianza y miedo para masacrar a los demás. Pero aunque sólo sea porque existe la posibilidad de que esa persona que acabamos de conocer sea excelente, merece la pena que nos comportemos de manera excelente con ella. Fíjate; imagina, por un momento, que efectivamente esa persona es exactamente lo que estas buscando en el ser humano, y tu además eres lo que ella busca. ¿Querrás estropearlo comportándote mal con ella? En mi opinión merece la pena que te hagan daño una vez mas, aunque sea un dolor muy fuerte, sólo por intentar que la belleza que esa persona tiene dentro, no se quede dentro por miedo a tu comportamiento.

Jo, hija, me parece que estas inspirada!... Me ha venido muy bien oirte. Voy a ver si el lunes me acerco a Medina, a ver si tengo suerte y es mi alma gemela!! De hecho, me vendría bien un compañero para la comida y incluso podemos irnos algún día jugar al ping pong al gimnasio de al lado!!

(Se quedan los dos en silencio. Natalia le mira. Sergio está con la cabeza agachada pensando)

Lo que pasa es que, al final, con tanto mal trato lo que termino aprendiendo es que algo estoy haciendo mal, porque como todo el mundo se aleja de mi como de la peste!!

Si, la verdad es que un poco si que apestas...

No se Natalia.

Pero chico es que apestas!! No se que colonia te has echado, pero es que huele desde aquí!!.

Pues la verdad es que si que me he echado colonia, a ver si me animaba oliendo un poco bien.. Y es esa de O de grass tan famosa que anuncian por la tele. Me ha costado un riñón y es un frasquito que es una miseria!!

Ya te digo. Esa tenia que ser. La verdad es que no me gusta nada esa colonia... No se, es demasiado fuerte para mi.

Este olfato mío me va a perder un día.

Un día quedamos, y nos vamos a comprar colonia.

Si, me parece un plan excelente!. Fíjate lo bueno que me parece, que hasta dejaría de ir a la oficina para ir a comprar colonia contigo. Sólo tendría que decir al jefe: "Don Ernesto, me voy a comprar colonia" Y como el hombre es tan majete conmigo, seguro que me decía " no hay problema, incluso fíjate voy a dejar de adorar las tetas de Lucia, y me voy a comprar colonia contigo"

ja ja ja

Jo, es que cada vez que le lleva café, o entra en su oficina para tomar nota de algo, o a lo que sea, no le quita los ojos de las tetas. Algún día se le va a caer la baba de tanto mirar.

Bueeeeno. Veo que estas un poco mejor.

Me viene bien respirar un poquito de aire fresco. Y tu, aunque te metas conmigo, me das una paz, de verdad, que me encanta.

(Le mira, directamente a los ojos, con una gran sonrisa).

Natalia, ¿quieres que vayamos a dar un paseito? Aqui empieza a hacer un calor endemoniado y, con el día que se ha quedado, la verdad es que apetece ¿no?

Mira, estaba pensando lo mismo. Me apetece mucho ir al parquecito a pasear... Podemos llamar a Antonio y Marina. Siempre terminamos en muy buenas conversaciones cuando estamos los cuatro. Y, bueno, ya que estamos en el parquecito nos podemos acercar a Julio y nos metemos unos cuantos vinitos pa´l cuerpo. Y te aseguro que, para esta noche, no se nos queda ni un solo problema sin resolver.

Eso, eso! A emborracharnos como locos!